COMUNICADO SOBRE
ASCENSO DE JUEZ DEVUELTO PARA NUEVA PONDERACION
La Asociación Jueces Dominicanos para la
Democracia (JUDEMO), entidad que
agrupa a profesionales de la judicatura del país, con personalidad jurídica
propia, según consta en el Registro Nacional de Incorporación No. 003917/2011,
provisto por la Procuraduría General de la República, por medio del presente
comunicado expresa su desconcierto frente al proceso inconcluso de aprobación
de las propuestas sometidas por el Consejo del Poder Judicial por ante la
Suprema Corte de Justicia (SCJ), pero la perplejidad es aún mayor, respecto a
lo suscitado en el caso del magistrado Daniel
Julio Nolasco Olivo, actual Juez del Cuarto Tribunal Colegiado de la Cámara
Penal del Juzgado de Primera Instancia del Distrito Nacional, que siendo un
candidato votado a unanimidad para ser promovido a la Primera Sala Penal de la
Corte de Apelación de esta demarcación jurisdiccional, se devolvió dicha
candidatura, así acreditada, con el
apoyo total de los honorables consejeros, para una nueva ponderación.
De cara a semejante situación
cabe recordar que la Ley de Carrera Judicial No. 327-98 y su reglamento de
aplicación establecen los parámetros que han de tomarse en cuenta para los
ascensos, traslados y cambios en los cargos de los jueces del Poder Judicial.
En efecto, el artículo 21 del referido estatuto jurídico preceptúa lo siguiente:
“Los jueces ascenderán en el escalafón de
la judicatura a la categoría inmediatamente superior, de acuerdo con previa
calificación de los méritos acumulados, años en servicio, cursos de post-grado,
producción bibliográfica y el resultado de la evaluación de su rendimiento.”
En relación con lo anterior
resulta propicio destacar que el
magistrado Nolasco Olivo ingresó al
Poder Judicial en la categoría de Juez de Paz, en fecha once (11) de noviembre
de 1992. Y el 28 de mayo de 1998, fue cuando se le
promovió a la posición de Juez de Primera Instancia, cargo que ha ocupado
durante 14 años, pero el servicio total prestado a la judicatura nacional se
acerca ya a los veinte (20) años, de
forma ininterrumpida.
Aparte de un ejercicio profesional en la
judicatura tan prolongado, el magistrado Nolasco
Olivo comparte el ministerio de juzgar con la actividad académica en la
Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), donde lleva más de doce (12) años
impartiendo docencia como profesor adscrito en las cátedras de Derecho Civil y
Penal. Igualmente ha hecho aportes significativos a la literatura jurídica de
nuestro país, pues cuenta con cinco (5) obras publicadas, tres a título
individual y dos libros bajo la modalidad colectiva, lo cual no ha sido óbice
para el rendimiento judicial, puesto que el resultado de su trabajo jurisdiccional
tiene un desempeño calificado como excelente.
El comportamiento ético del magistrado Nolasco
es incuestionable, pues en su trayectoria de juez pocos usuarios del servicio
judicial han puesto su honorabilidad en tela de juicio. Por el contrario, su
aquilatado prestigio le ha hecho merecedor de varios reconocimientos de instituciones
tales como el Colegio de Abogados de la República Dominicana (CARD), la
Asociación Pro Desarrollo de Villa Fundación (Adefu), la Unión Católica de
Comunicadores Sociales (Ucadecos), así como un colectivo de organizaciones que
luchan contra la corrupción, entre ellas las fundaciones de Cruz Jiminián y
Nemen Nader Rodríguez. En ese mismo sentido, huelga decir que en contra de este
juzgador nunca se ha llevado a cabo ningún juicio disciplinario, bajo la
sospecha fundada o infundada para atribuirle la comisión de alguna inconducta,
ya sea pública o privada.
Un sistema de carrera Judicial ha
de garantizar la imparcialidad e independencia de los jueces, por cuanto está
cimentado en la profesionalización y superación de los magistrados. En efecto,
la promoción o ascenso de todo juez debe ser una recompensa por el mérito
ganado, de suerte que se pueda ver que el esfuerzo profesional y el sacrificio
personal han valido la pena, en busca de ir dejando atrás el pasado reciente,
cuando imperaban criterios ajenos a los previstos en el ordenamiento jurídico
que rige la materia en nuestro país, los cuales constituyen privilegios
irritantes con graves consecuencias que afectan seriamente el proceso de
consolidación de la independencia judicial.
JUDEMO hace un llamamiento al
Consejo del Poder Judicial, órgano constitucional que funge como el gobierno de
los jueces en la República Dominicana, a que al volver a ponderar la propuesta
de ascenso del magistrado Daniel Julio
Nolasco Olivo proceda a ratificarla por contar con sobrados méritos para
acceder a la Primera Sala de la Cámara Penal de la Corte de Apelación del
Distrito Nacional, en procura de que sea finalmente aprobada de manera
indefectible por la Suprema Corte de Justicia, tribunal supremo que está en el
deber ineludible de acoger las
candidaturas de promoción, máxime cuando son el resultado irrestricto de la
aplicación de la Ley de Carrera, tal como acontece con el caso que anima este
comunicado.
En la Ciudad de Santo Domingo, Distrito
Nacional, Capital de la República Dominicana a los veintiséis (26) días del mes
de abril del año dos mil doce (2012).
Por la Directiva de Jueces Dominicanos para la
Democracia (JUDEMO)
Rosalba Garib Holguín
Presidenta en funciones
Yo, Rosanna Vásquez Febrillet, Secretaria
Ad Hoc de la sesión de la Directiva de Jueces Dominicanos para la Democracia
(JUDEMO) del día de la fecha, certifico y Doy fe de que el contenido del
presente documento fue adoptado en sesión extraordinaria de indicada Junta
Directiva celebrada en uno de las oficinas ubicadas en el Palacio de Justicia
de Ciudad Nueva a los veintiséis (26) días del mes de abril del año dos mil doce
(2012).
Rosanna Vásquez Febrillet (Secretaria
Ad Hoc)
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